El Yiempo de Dios y Los Milagros

“Es mejor ir más allá de los límites de la caridad que fracasar en ella”.

San Vicente de Paúl

Acudimos al precario apartamento de la familia para responder a una solicitud de proporcionar una mesa de comedor y sillas para reemplazar la mesa rota recuperada de un contenedor de basura. Encontramos pocos muebles, la mayoría de los cuales se obtuvieron de un contenedor de basura. El sofá de la sala hacía las veces de cama y la lámpara no funcionaba. Al darse cuenta de que proporcionaríamos una mesa, sillas y muebles para reemplazar lo que estábamos sentados, la madre comenzó a llorar. Preguntamos qué más podíamos hacer. Dijo que ella, su esposo y una hija muy pequeña dormían en colchones en el piso del dormitorio. Observamos que los colchones estaban en condiciones no aptas para dormir.

La madre trabaja como lavaplatos en un hospital de Houston y su esposo lucha por mantener su empleo. El cumpleaños de su hija de ocho años no se celebró la semana pasada (la madre nos dijo que su hija le rogó que entendiera que todo estaba bien). Su hijo se retiró de las clases del semestre de otoño porque no pudo pagar los $300 de gastos de matrícula. Su hijo ahora tiene un trabajo de medio tiempo para pagar la matrícula del próximo semestre. La madre está tomando clases de inglés y estudiando para obtener su ciudadanía estadounidense el próximo año.

El Señor obra de maneras misteriosas. Se recibió una donación de feligreses de $1,000.00 para nuestra Conferencia diez minutos antes de partir para nuestra visita domiciliaria, lo que facilitó nuestras pautas presupuestarias. Pudimos pedir camas nuevas económicas y muebles usados ​​del almacén Vicentino para esta familia.

A lo largo de la visita a la casa, la madre sonrió gentilmente y nunca pidió nada más que la mesa del comedor. Todas las ofertas adicionales de asistencia surgieron de nuestras consultas y observaciones sobre qué más podíamos hacer por su familia.

La oración de clausura se llevó a cabo en inglés y español, simultáneamente. Mientras agradecíamos a Dios por el honor de estar con ella esa tarde y por la fortaleza para seguir cuidando a su familia, oró lo siguiente: “Gracias, Jesús, por los regalos que me han llegado hoy. Gracias por traerme amigos para que me ayuden. Bendice a mis amigos por haber mostrado misericordia de mí y bendice a todos aquellos a quienes seguirán sirviendo. Por favor, permíteme poder ayudar a otros algún día, como ellos me han ayudado a mí. Gracias Jesús. Gracias Jesús. Gracias Jesús. Amén."

La visita domiciliaria vicenciana es el núcleo de nuestro ministerio. La visita es más que la validación de la necesidad. La visita es para compartir tiempo y establecer una relación con personas necesitadas. Oramos y sentimos la presencia de Dios.

Nuestra Conferencia Parroquial SVdP extiende su humilde y sincera gratitud a Monseñor Bill ya los feligreses de nuestra Iglesia, por su abrumadora caridad para ayudarnos a cuidar a Jesús en los que sufren y en los pobres. Sus oraciones y cheques de donación hechos a nuestra Conferencia Parroquial SVdP son muy necesarios y humildemente apreciados. Para obtener información sobre cómo unirse a nosotros en nuestra misión de santidad y caridad, llame y deje un mensaje al 713-664-5350.

Levítico 25:35 - "Y si tu hermano empobreciere, y no pudiere sustentarse contigo, tú lo sustentarás; como extranjero y peregrino vivirá contigo".